Aceites Esenciales Descongestionantes
La llegada del invierno y las bajas temperaturas usualmente son sinónimo de aumento de las enfermedades respiratorias, las cuales suelen originarse por el ataque de virus y bacterias que consiguen adentrarse en nuestro sistema. Por lo general, los principales síntomas asociados son: congestión nasal, tos, estornudos, picazón nasal y ocular, los que dificultan la capacidad de respirar con normalidad limitando la entrada necesaria de oxígeno, haciéndonos sentir incómodos durante el día e impidiéndonos dormir bien por la noche, perjudicando así nuestro bienestar.
Una opción de origen natural para hacer más llevaderas estas infecciones respiratorias es con el uso de aceites esenciales, los cuales podrán aliviar o minimizar esta congestión nasal junto a otros síntomas relacionados. En virtud de ello, te los presentamos a continuación:
- Aceite Esencial Eucalipto: Tiene un aroma refrescante y es uno de los mejores remedios para las vías respiratorias, pues posee propiedades expectorantes, mucolíticas y antimicrobianas.
- Aceite Esencial Menta: Conocido como un tónico para las vías respiratorias, ya que disminuye la congestión e irritación de nariz y garganta.
- Aceite Esencial Árbol de Té: Contiene propiedades antibióticas, antivirales e inmunoestimulantes, gracias a su aplicación se reduce la producción de moco y calma la tos.
- Aceite Esencial Kunzea: Posee propiedades descongestivas y expectorantes. En vaporización es ideal para purificar el aire.
- Aceite Esencial Ravintsara: Posee propiedades antivíricas, antimicrobianas y expectorantes. De aroma fresco, es ideal para vaporizar y refrescar una habitación.
- Aceite Esencial Romero: Con su aroma refrescante y propiedades expectorantes y mucolíticas nos puede servir para descongestionar y aliviar el dolor de cabeza causado por la sinusitis.
- Aceite Esencial Lavanda: Es muy útil en los casos leves de resfrío e infecciones de garganta, pues descongestiona, desinflama y relaja.
Para beneficiarte de las propiedades de estos aceites esenciales puedes hacerlo mediante inhalación, vaporización o aplicación de forma tópica en la piel.
Finalmente, es importante también evitar las condiciones ambientales que facilitan la propagación de estos virus y bacterias, como lo son: el encierro, falta de ventilación frecuente de las habitaciones, aglomeraciones de personas, exponerse a cambios bruscos de temperatura, entre otras.